top of page
Buscar

Cuidadores en tiempos de cuarentena

Foto del escritor: Sofía Alejandra Vélez Sofía Alejandra Vélez

Aunque todos estemos pasando por un mismo evento, indudablemente para cada uno tendrá diferente significado. Nuestra vida se ha visto trastocada de diferentes maneras y las secuelas que provocará este evento para muchos serán imborrables. No obstante, podríamos conversar sobre tantas particularidades que muchas personas se encuentran experimentando actualmente y no acabaríamos. Pero hoy, le dedico esta nota a todos esos cuidadores en tiempos de cuarentena.


¿A quiénes me refiero? A todos los que están a cargo de personas que dependen de ellos para la gran mayoría de sus tareas del diario vivir.

En tiempos "normales" esta tarea es sumamente ardua, y aunque se haga con amor no podemos negar cuan desgastante es a nivel físico y emocional. Actualmente, este desgaste se ha triplicado ya que nos debemos enfocar en las tareas como cuidadores, en las personales, en las tareas universitarias, en las del hogar, las del trabajo y sobre todo cargar con la gran preocupación que nos provoca la situación actual de nuestro país y del mundo.


Cuan difícil es canalizar las emociones de un niño o adulto con discapacidad en estos tiempos de cuarentena cuando nosotros mismos nos encontramos luchando con nuestras propias emociones. Es fácil para todos aconsejarnos de qué cosas debemos hacer y cómo debemos trabajar la situación. Indudablemente, se los agradecemos y mucho, pero en muchas ocasiones prevalece la frustración. Aquí donde nos ven aunque de pie pero desgastados, hemos intentado una y miles alternativas para trabajar con nuestra situación en y antes de la cuarentena.


Pero aún así nos levantamos día a día con tantas esperanzas de tomar el control de nuestras vidas, de mejorar nuestra situación y poder sacar aunque sea un ratito de tiempo para nosotros. Tampoco podemos negar que hay momentos en que la desesperación nos consume y sólo sentimos ganas de desplomarnos en llanto. Pero en mi caso, al final del día ver la carita de mi hermanita Rocío, me llena de vida y aunque es sacrificador vale la pena. ¿Les pasa igual?


Y hoy les quiero decir a ustedes los cuidadores que los admiro a cada uno y no están solos. Somos unos guerreros de la vida y nuestras vidas tienen un doble propósito. Permitámonos caer cuando nos sentimos agotados, pero no nos acostumbremos a estar en el suelo. Usemos este tiempo para rebotar nuevamente con más ganas, con más fuerzas. Porque de eso se trata de no rendirnos y demostrar que no nos limitamos por nada y vamos por más.



 
 
 

Opmerkingen


bottom of page